jueves, 26 de noviembre de 2009

In memoriam

Hace mucho que no escribo por aqui,pero esque esta vez me ha costado más de lo normal.No porque no tuviera temas,sino porque el tema a tratar era algo triste,y cuando es así cuesta más.
Un reloj fue por lo que marcó el final de su vida,una noche en la que rezando minutos antes yo le besaba,le decía que no le vería hasta el finde semana,y le deseaba buenas noches,aunque esas serían las últimas buenas noches de su vida.
Aunque era un hombre erre que erre,siempre tenia una sonrisa para todos,un algo que decir que hacia que te rieras,con una pinza en la oreja,un peñizco en los mofletes o un revistazo hacian que en ese momento tu te enfurecieras tanto que al dar la vuelta quisieras reirte hasta llorar,siempre habia sido un hombre bueno,trabajador,humilde,que veia sus tardes de verano paseando junto al Duero,en un barrio lleno de recuerdos,lleno de gente más joven que se estaba marchando,y esque el siempre decía que era el último del barrio....
En su mente sólo habia ojos para su hija y sus nietas,esos ojos que esa noche los cerró,para no volverlos a abrir,y ese reloj que marcaba su hora lo llevaré siempre conmigo,porque para mi el reloj de su vida no ha dejado de funcionar en mi corazón.

Te quiero abuelito


17 comentarios:

Jero Díez dijo...

Es precioso Mara...

Desde el cielo tu abuelo estará orgulloso por siempre de la nieta que tiene...

(L)

Unknown dijo...

que lindo Mara. continua recordando a tu abuelocon recurdos an bonitos. él estará orgulloso de ti seguro.

un beso

Nadia dijo...

Como se le echa de menos...
Muy bonito el recordatorio. Se nota que era alguien especial para ti.

Por cierto, el nombre del gato ya lo hemos seleccionado en mi otro blog: http://lamirilladenadia.blogspot.com, pero gracias!

Juan Rodríguez Millán dijo...

Pues eso es lo bonito, seguir recordando a la gente querida y tener muy presentes los buenos momentos.

Anónimo dijo...

Un beso fuerte, niña.

Ánimo.

Nebulina dijo...

Ánimo
:*

Lola dijo...

Muy pero que muy bonito el recuerdo para tu abuelo. De verdad Mara que me ha emocionado.
Te abrazo fuerte fuerte Lola

elena dijo...

los que le conocimos, aunque tampoco fuese tanto, siempre le recordaremos:)
tu texto me ha echo llorar por muchas cosas..y muchos momentos.
guardale siempre en tu corazon, por que es donde seguira vivo por siempre:)



te quiero tamyy!

GO dijo...

Sabes? poseemos una cualidad estupenda. Sentir.
SENTIR en mayúsculas. Y esto es algo que estoy seguro, se transmite; aún en la distancia, en la ausencia.
Que bien que le/nos "regales" esta Entrada.
Que te hayas quedado con su "reloj"
Un abrazo, M@r@.

Silvia dijo...

Lo siento mucho, guapa, sé por lo que estás pasando ahora, por desgracia.

Bss.

Albuu. dijo...

Es duro..te lo digo por experiencia..pero al final lo que queda son los recuerdos bonitos, como todos los que cuentas, y es lo que vale..:)

Y si..puedes llamarme loca, derrochadora, o lo que quieras, te dejo jaja
Pero lo que me dan ellos cada vez que los veo en directo no se paga ni con todo el dinero del mundo..
Mira a ver si te apuntas a alguno..te aseguro que merece la pena ;)

Un beso gigante nena!

Lauri dijo...

Un besito para el abuelo... y otro para ti, Mara. Precioso :)

Persefone dijo...

La gente vive en nuestros recuerdos. El siempre estará contigo.

Mil besos y abrazos.

Ana Pedrero dijo...

Ese reloj, cariño, seguirá latiendo siempre, siempre, en tu corazón. Todos tenemos relojes que se activan. También por esos relojes vivimos, Mara: con alegría, por todo lo vivido, por todo lo aprendido, por todo lo compartido. Por tanto amor.

Consérvalo siempre, mi niña. Así seguirá rabiosamente vivo, como un reloj aprisionado en tus sueños.

Mil besos. Te abrazo siempre.

Unknown dijo...

Hola M@r@

siento mucho la muerte de tu abuelo, por lo que cuentas en tu precioso blog, ha tenido que ser una pesona extraordinaria. Le has hecho un homenaje muy digno con tu post. Un abrazo.

Y yo con estos pelos dijo...

Muy bonito el post, y si siempre tenemos que recordar a la gente por los momentos bonitos. Espero que poco a poco te vayas animando. Ya siento que tu vuelta al blog haya tenido que ser asi. Un besazo

Víctor L. Gómez dijo...

Lo bueno es que la gente buena nunca morirá, siempre estará presente en nuestro día a día.

Un besito, Mara!