Un reloj fue por lo que marcó el final de su vida,una noche en la que rezando minutos antes yo le besaba,le decía que no le vería hasta el finde semana,y le deseaba buenas noches,aunque esas serían las últimas buenas noches de su vida.
Aunque era un hombre erre que erre,siempre tenia una sonrisa para todos,un algo que decir que hacia que te rieras,con una pinza en la oreja,un peñizco en los mofletes o un revistazo hacian que en ese momento tu te enfurecieras tanto que al dar la vuelta quisieras reirte hasta llorar,siempre habia sido un hombre bueno,trabajador,humilde,que veia sus tardes de verano paseando junto al Duero,en un barrio lleno de recuerdos,lleno de gente más joven que se estaba marchando,y esque el siempre decía que era el último del barrio....
En su mente sólo habia ojos para su hija y sus nietas,esos ojos que esa noche los cerró,para no volverlos a abrir,y ese reloj que marcaba su hora lo llevaré siempre conmigo,porque para mi el reloj de su vida no ha dejado de funcionar en mi corazón.
Te quiero abuelito
